sábado, 6 de marzo de 2010

DESCANSA EN PAZ, HERMANO

REQUIESCAT IN PACE




EN PAZ DESCANCE



"Perdónales, Señor; ellos no saben lo que hacen."

Asi dicen que dijo Jesús.



¿No saben lo que hacen?

Dolor mio es que yo no puedo decir lo mismo.

Yo tengo que decir las cosas como las pienso yo, no como me enseñen los que siguen las carcomidas fórmulas sociales que nada tienen que ver con las realidades que vive el hombre y si mucho con las conveniencias y acomodaciones útiles a los poderosos.

¡Mentiras! ¡Puras mentiras!





¿Cómo espera nadie que los hombres que aman tanto la Vida y la Libertad que están dispuestos a dar, y dan, sus propias vidas para que los otros, tengan las oportunidades de ser libres que ellos no tuvieron? No, no pueden descansar en paz porque se alejan al sueño eterno quienes se marcharon sabiendo que la obra no estaba terminada aún. Solo descansa quien no tiene nada que hacer. Mentira es el deseo de que tenga paz el muerto. Más bien se cumple con las fórmulas sociales en uso en la sociedad en que vivimos. Eso es todo.



Si uno solo de los que envian mensajes de condolencia hubo elevado su voz, si un politico, gobernante o barrendero hubiese movido un dedo para eliminar el mal, tal vez el caido pudiera dormir en paz en el más allá. Pero no; unirse al coro de las lamentaciones al igual que ir a darse con la cabeza al Muro de Los Lamentos hace buena copia para la prensa. Eso es todo. Yo no le niego una iota de buena voluntad a todos aquellos que ahora lloran, que miran los videos, que le expresan sus simpatias a la pobre madre herida; no, todo eso es justo, noble y bueno.



Yo no que no acepto muy fácilmente es la vocinglera multitud de hombres y gobiernos que ahora pretenden entender, quieren "hacerle justicia" al muerto. Si, hay mucho de bueno para la causa de la justicia en esos actos.; eso nadie lo puede negar...y ojalá hubieran muchos más. Pero el heróico ser humano ya está muerto. Su vida depositada en el altar de la Patria con las únicas armas con que supo luchar, que fueron sus propias energias, su voz y su sangre. Y mucho en el futor de él oiremos.



Pero en cuanto a la sociedad de hombres y naciones decir que les duele la pérdida suena bonito, atare votantes a las úrnas en elecciones ajenas, lejanas apenas un poco interesadas como aves que miran al pasar. ¡Pura mentira! Tiempo de sobra hubo.



Todas las proclamas, las canciones, los discursos que se han pronunciado y que piremos muchas veces mas por un mes, si mucho, no nos dicen por qué nadie acudió en su auxilio, y por favor ver en en mis palabras que no se trata de que fueran a ponerle un suero, o decirle que eso le hacia daño, que dejara esa lucha, que se entregara al tirano y aceptara callado, no; yo no hablo de ese tipo de auxilio. Cuando un hombre de temple y profundo amor patrio expone su vida sabe muy bien cual es el precio que va a pagar. No hay que pedirle que desista, lo que se necesita es decirle "Heme aqui, luchando a tulado", y empuñar el arma que se tenga a manos, se sepa usar o se esté dispuesto a usar. En otras palabras, luchar no ya porque le squen de la mazmorra en que él está, no; es que le saquen del sistema que asfixia a su pais. Eso es lo que necesita el pueblo; eso es lo necesita Cuba, eso es por lo que tantos han dado sus vidad y tantos aún estamos dando aunque sea un pensamiento de nuestras existencias. Esa es la única verdad que tiene cierta validez para mi.



Descanse en "paz", hermano. Descansen en "Paz" todos los hermanos caidos en este largo camino desde el año 1952 y 1959, que memorias tenemos aún. Pero si estamos frente a una dictadura que no respeta "¡ni la paz de los sepúlcros!" Donde a diario se vilifica y maldice a los que allí yacen esperando el momento de poder dormir en paz.



Fácil y cómodo es ahora unir los buenos deseos al caido. Dios se los pague; yo no les niego la bondad que entregan al sacrificio del hermano caido, no; yo he predicado por muchos años que todos los esfuerzos y todas las acciones y voluntades son válidas en esta lucha. Yo solo reclamo a la humanidad que acciones y no reaccione. DIcen por ahi que el que dá primero da dos veces. Y es cierto. Ellos nos atacan, nos torturan, nos encarcelan y nos matan, mientras nosotros permanecemos con los brazos cruzados hasta que ellos han realizado su maldad para luego reaccionar. Eñ que llega último al banquete solo encuentras despojos y sobras pudedumbres. Y la mesa de la lucha cubana está puesta y servida desde hace muchos años...no es que nadie viene a enterarse ahora.



Miramos hacia el exterior, al gobierno ajeno, a los demás para que nos traigan nuestros derechos y libertades en bandejas...mientras los nuestros, los vecinos, los amigos, y los millones por quienes estamos dando nuestras vidas lamentan, murmuran en la obscuridad, gruñen en silencio detestan al tiranos, pero se adaptan, se ajustan, se callan y dejan que la tirania cebe sus malditas panzas con la sangre y el dolor del hermano que trata de defenderlos. Luego nos quejamos del ajeno por sus culpas. Culpas que tienen los pueblos y gobiernos que se auto titulan poseédores de derechos y libertades que no saben o quieren compartir, y gobernantes que mientras que quieren libertades para sus propios paises, comparten copas y cenas con los tiranos y les llaman grandes titulos de honor con varios sofismas por escudos.



No, no pueden descansar en paz, porque la paz solo vive en el corazón del que la ama. No, no pueden ni necesitan pedir libertad para sus cuerpos ora encarcelado ora en el sepulcro, porque el Hombre Libre, es "Hombre" y es "Libre" dentro de su propio yo interno. Nada hay, nada habrá lamás que robarle pueda robarle la libertad a un hombre que es libre en su propio ser. Mi ccuerpo ha estado en prisión, mis carnes han sufrido el dolor de las torturas, mi estómago ha sentido el dolor del hambre y yo he esentido el dolor conjunto de muchas cosas, pero dentro de mi cerebro nadie jamás penetrar pudo. Por consiguiente siempre he sido un hombre libre. De ahoi mi pensamiento. No; no es que le pongan usted fuera de esas mazmorras y rejas, no; que en las calles de Cuba se está a veces en peores condiciones y sin libertad alguna. Se trata de la libertad del pueblo, del pais, de la Patria, Solo de eso se trata. Asi cuando hablamos de desear que un heróico ser humano descanse en paz, antes de hacerlo debiamos preguntános ¿Realmente le deseo yo la "paz"...? ¿O acáso descargo mi cuerpo de culpas por no hacer yo mi parte? Pensemos en eso.



Mientras tanto, hermanos caidos, queda mucho por hacer, si allá hay maneras, ayudarnos un poquito más, asi tal vez podrán ustedes y nosotros un dia, aqui en la tierra, y allá en el infinito, descansar en paz.

DonGilberto