IU-ICV saca adelante su propuesta con la ayuda de socialistas, PNV y BNG
La tasa a las transacciones financieras (TTF) aún sigue lejos, sujeta al consenso internacional, pero los partidarios de su impulso en España ayer dieron un paso más. Fue la Comisión de Economía del Congreso la que avaló la creación de un impuesto que penalice los operaciones bancarias “en un sector que favorece la especulación a gran escala sobre las divisas”. Es decir, un gravamen inspirado en la llamada tasa Tobin. La proposición no de ley, planteada por Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya Verds (IU-ICV), recibió el respaldo de PSOE, PNV y BNG. El PP y CiU la rechazaron. En total, 21 votos a favor frente a 16 en contra.
La moción insta al Gobierno a que “sitúe como prioridad política de sus participaciones en el Ecofin [el Consejo de Ministros de Finanzas de la UE], el Consejo Europeo y las reuniones del G-20” la aprobación de cuatro puntos clave: el impulso a una TTF, un calendario “concreto” de despliegue de la misma, la fijación de un tipo impositivo “que disuada a los inversores financieros a realizar operaciones únicamente especulativas” y el lanzamiento de medidas legales y administrativas “que permitan la lucha contra los paraísos fiscales”. A la redacción de IU-ICV los socialistas sólo agregaron una coletilla vía enmienda: que el Ejecutivo español actúe “coordinándose adecuadamente con la comunidad internacional”.