Y no es que MGM lo haga porque se haya quedado sin ideas o vaya floja de fondos habiendo tenido taquillazos como Skyfall y El Hobbit. Simplemente quiere darle otro aire al clásico del 59 y ser más fiel a la novela. Como centrarse más en los primos años como amigos de Ben-Hur y Messala, hasta que llega la traición de Messala y la posterior venganza de Ben-Hur, alternándola con la historia de Jesucristo.
Si tenemos en cuenta que hace más de cuarenta años de aquella adaptación, y que muchas personas ni tan siquiera la hayan visto, supone un buen argumento para dar rienda suelta a este proyecto que indica es de lo más ambicioso, ya que cuenta con un guión de Keith Clarke. Y como en Hollywood le ha dado por los remakes y las producciones bíblicas, Ben-Hur está incluida en el lote de las escrituras bíblicas.