domingo, 3 de agosto de 2008

Monstruosos

El otro día estábamos viendo Boston legal y leímos en los créditos que en el capítulo saldría Ruppert Everett. Empieza el capítulo y Rohnda Mitra se encuentra con su ex novio que además es inglés. Durante un rato pensé que qué raro, que si iba a salir Rupert Everett ¿por qué no le habían dado ese papel? Pero entonces lo entendí todo. ESE era Rupert Everett.

Que un actor se cambie la cara no es raro, la dictadura de los estudios provoca que los mayores de 30 años tengan que tomar decisiones radicales para seguir viviendo de la ficción. Pero... la gente guapa, la gente perfecta no puede volverse un monstruo. Esto es una PLAGA.

Ruppert Everett se hizo esto:


Un hombre que además había sido modelo para Yves Saint Laurent!!! Un hombre de lo más atractivo de pronto decide ¿qué? ¿Quitarse las bolsas? ¿Pretendía dormir con los ojos abiertos? ¿Qué habrá sentido este hombre al verse en el espejo y encontrarse con otro? Me recuerda mucho a la operación de Robert Redford (a éste le salió igual de mal) y a la de George Clooney (a él bien, gracias a Dios). El problema es que entran en una vorágine de la que no pueden salir. Y luego pasa lo que pasa, que el arreglo hay que arreglarlo más.

Después de esta sorpresa nos encontramos con otra muy parecida. Estábamos haciendo zapping y nos topamos con Entre fantasmas en Cuatro, en eso vemos a Jennifer Love Hewyitt hablando con una mujer con unos labios desproporcionados, tanto que pensé que era maquillaje. No podía apartar mis ojos de la pantalla planteándome si aquello era verdad. Me estaba preguntando cómo era posible que un director de casting decidiera coger a esa atracción de feria y no a una actriz, cuando mi novio de pronto dijo "Espera un momento... ¿esa no es Nikki Cox?". ¿Quién? ¿La de Las Vegas? ¿La de Infelices para siempre???


Esto se me escapa. No puedo entender como una chica realmente guapa, a la que vale, se le pasó el arroz y ya debería haber hecho alguna película en su vida, ha sido capaz de destrozarse la cara de esa manera (en 3D es aún peor). Está claro que la contratan por lo que fue. La cosa es que la chica va a estrenos y posa y no está hundida en su casa llorando. Le debe gustar eso que tiene entre la nariz y la barbilla.

Esta operación de Nikki Cox es terrible pero hay algo peor, algo que me ha causado verdadero dolor, porque yo consideraba a Lara Flynn Boyle la mujer más hermosa del planeta desde Kim Basinger. Vale que era demasiado delgada, pero era bellísima. Y lo más triste es que además era una actriz magnífica.


Pero esta chica tenía serios problemas psicológicos, que ya se veían venir desde su noviazgo con Jack Nicholson. Era anoréxica y lo siguiente debía ser, como no, el cambio de cara. Sin embargo, a diferencia de los dos casos anteriores, parece que esta vez se trata de un accidente . Alguien pinchó en el nervio equivocado (es mi teoría, no he leído nada al respecto). De todas las cirugías que he visto, ésta es para mí la más triste.

¿No habría que detener esto? ¿Por qué los siguen contratando? ¿Qué estamos haciendo con nuestras estrellas? Les dejo más casos terribles.




Y entre tanto mamarracho una muestra de cirugía estética lógica.


Más casos escalofriantes aquí.