lunes, 27 de febrero de 2012

ILUMINACION NATURAL. MEMORIAS DE CHINA (II): La construcción en China, ¿está en Crisis?

Os explicaba en las memorias de China (I) la constitución de nuestra empresa en China Shanghai Daylight Solution (SDS), evidentemente centrada en el mercado de la construcción. Pues muy posiblemente, China sea el mercado de la construcción más grande que exista en el mundo, simplemente por la cantidad de habitantes que hay en China, y por movimientos migratorios desde el campo a las ciudades.

Este mercado tan inmenso es lo que nos llevó a tomar la decisión de entrar en él. Hace un año daba vértigo sólo repasar las cifras de viviendas construidas, y observar directamente en todas las ciudades la cantidad de grúas existentes.

Recuerdo en Septiembre 2011 durante una cena en Beijing con varios empresarios Chinos, (¡¡el mayor tenía 35 años!!), la situación del mercado inmobiliario Chino. Todos  decían que China nunca podía sufrir una burbuja inmobiliaria como la ocurrida en occidente y todos comentaban lo fácil que se podía ganar dinero en este mercado, se invertía un dinero en una vivienda y pasado unos meses se vendía por mucho más dinero del invertido inicialmente, ¿ESPECULACIÓN?
Yo recuerdo comentar a todos los presentes en esta cena que la historia me era familiar y que no sé cuánto tardarían en llegar, pero que China no era diferente que el resto del mundo y que la burbuja acabaría explotando. Nadie apoyó mi teoría basada en hechos reales, pero el tiempo ha demostrado que, ¡¡China sí que es diferente!!


Sin ninguna duda es una economía capitalista salvaje, pero tiene un poder político único, que no duda en intervenir cuando lo cree necesario, sin tener que mediar referéndums, apoyos parlamentarios, propuestas de ley, enmiendas etc, simplemente se aplica y punto. Esto es lo que hace a China diferente al resto de economías capitalistas, y de ahí el nombre de CAPICOMUNISMO. Mejor o peor, no seré yo quién lo juzgue, quizás el tiempo lo definirá, pero por el momento el gobierno hace unos meses instauró la siguiente ley:

     1. Las hipotecas a primera vivienda podrán seguir llegando al 70% del valor del inmueble. Con esto siguen favoreciendo la compra de 1ª vivienda a jóvenes parejas que NECESITAN comprar su casa. Es una necesidad. 
     2. Las hipotecas para 2ª residencias podrán ser como máximo del 30%, y una vez adquiridas no se podrán vender al mercado hasta pasados 5 años.

Esta medida entre otras cosas se puede poner en práctica pues todos los bancos son Públicos y tienen control absoluto sobre los precios de mercado y cuantías de hipotecas. Y ha conseguido que:
1. El mercado de 1ª residencia siga más o menos activo.
2. El mercado de especulación, esté absolutamente parado y esto ha afectado al mercado de alta gama residencial, que en China movía mucho dinero
3. Los precios en las ciudades más importantes, ya están empezando a bajar, 10%, 20% y más dependiendo de la vivienda.

Sin ir más lejos, en varias promociones en las que estábamos ofertando de alto standing, por el momento la respuesta ha sido “WAIT and SEE”, es decir, que no están vendiendo ni un apartamento. No es que la gente de dinero e inversores no tengan dinero Cash (pues hay realmente mucho), sinó que todo el mundo está esperando a que los precios bajen más o a que cambie la política, pues la gran mayoría de la población, cree que esta ley ha sido una medida aplicada por motivos políticos. No me atrevo a valorar este hecho, quizás sea una mezcla de ambas cosas, pero lo que está claro que en vez de esperar a que explote la burbuja la están intentando enfriar, sin dañar al mercado más básico.

La gran pregunta que se hace todo el mundo es: ¿Hasta cuándo este intervencionismo? La verdad es que por los comentarios que he podido recoger estos días con nuestros clientes, es que muchos creen, que cuando el nuevo presidente (Mr. Xi) tome posesión el próximo Septiembre-Octubre, las cosas volverán a su cauce, ya que tiene un perfil más liberal y menos intervencionista que el actual. De hecho dos de nuestros grandes clientes, siguen comprando parcelas para urbanizar.


Espacio Solar trabaja en China en varios frentes como lo hace en otras partes del mundo: Residencial, Industrial y sector Público. Cuando uno se desacelera el otro emerge y de esta manera siempre tenemos opciones de vender nuestro producto.

Oscars 2012


Lo de anoche fue tedioso, insípido, rancio y corto! Fue la ceremonia más corta de todas las que hemos visto y aún así fue aburridísima. Todo estaba medido, hasta los discursos, nadie se salió de madre. El único, claro, Sacha Baron Cohen, pero lo hizo antes: en la alfombra roja con Ryan Seacrest como víctima. Qué crueldad más brillante.



Billy Cristal fue un icono pero se ha vuelto rematadamente anticuado. Después de disfrutar de un Gervais ¿Cómo podemos volver a lo recatado? NO! No era el momento. Es verdad que todo ha sido una decisión urgente después de la huída de Eddie Murphy, pero el apaño se les ha quedado tristemente desangelado.

¡Incluso el año pasado todo fue mejor! ¡con un Franco fumado y perdido fue mejor!

El número del Circo del Sol fue epectacular, los vídeos esos de actores hablando del cine también estuvieron bien. Y ya. Fin del asunto.

De las películas no diré nada porque sé que me vais a odiar. No me gustó ninguna con la excepción de Moneyball que fue mi favorita del año junto con Young adult y 50/50. Así que las nominadas me daban igual. ¡Todo me daba igual!

Pero podemos hablar de los vestidos, que al fin y al cabo es lo que importa.

Angelina. Das grima nena. Pero a ti como si nada. Mostrando la pierna escuálida... te la suda todo. Y no me extraña. Eres una diva y esa debe ser la actitud.


Por delante y por detrás. Horribles las dos.


Emma Stone, eres lo más bonito del mundo. Ella hizo la única presentación en el escenario que valió la pena.

Gwyneth: la mejor.


Qué camaloénica es Jessica Chastein.  El vestido no me volvía loca, pero ella es preciosísima y todo lo hace bien.


Meryl, no voy a ver La dama de hierro porque te quiero. Alegría es poco.


Michelle Williams estaba maravillosa, tanto como debía estarlo su Marilyn. Pero no, fue la Marilyn más sosa, fea y asexual de la historia. No es culpa tuya nena, es culpa del que pensó que podías hacerlo.  


Penélope ¿Qué te ha pasado? ¿Qué te han hecho los Bardem? ¿Por qué te has convertido en una señora anodina? El color mal, el pelo mal, la forma mal. Cada vez que sales así demuestras inseguridad. Vuelve a contratar a tu estilista. Vuelve a Hollywood.


Rooney Mara, no te conviertas en Lisbeth Salander por favor.

Tina eterna.


Estamos super preocupados porque sabemos que Tom Cruise se ha retocado algo (otra vez) y no sabemos qué.



Por dios, qué tristeza de pareja! Cuando salieron por primera vez un amigo pensó que era el notario que traía los sobres.



Suspenso para Shailene Woodley que se ha olvidado de que es una adolescente.


Octavia Spencer estaba maravillosa, y se merecía su premio. Es sin duda lo mejor de la mediocre Criadas y Señoras.
 

 

APLAUSOS Y PALMADAS

El poeta, el escritor, y el artista llevan por la vida una enorme carga en su cerebro y corazón, una misión que es el decir lo otros sienten y no pueden, no saben o no quieren expresarlo pero si leerlo de la pluma de aquellos... El hombre se encuentra consigo mismo cuando se mira en la paleta del pintor, en el espejo de la página, en la escena del teatro, retratado alli con sus imaginarios colores y reales lienzos de emociones y caricias... Pero por esa misma razón aquellos que lo representan con sus artes se nutren del aplauso, de la critica, de la palmadita en la espalda.Todos los necesitamos.... Miles de páginas son escritas y publicadas cada dia por estos medios; millones de ¨amigos¨ llenan esas páginas con sus fotos y avatares, más millones aún aparecen cada dia y solicitan ser incluidos en las páginas y en la amistad del que escribe, pero más allá de mirar las fotos o tal vez leer tres segundos mo escriben, no dicen, no participan no dan señales de vida a ese cuya ¨amistad¨ piden, ni jamás le dejan saber si está escribiendo por el simple deseo de pasar su tiempo sin de otro modo tener sentido alguno sus vidas. Muchos siguen creyendo en los números, el que mas nombres tiene en su lista más popular es, más éxito tiene.... lamento ser el abogado del diablo...nada resulta más falso.

viernes, 24 de febrero de 2012

La Libélula azul

La Libélula azul


Las redondas olas sin crestas que recorren a ritmo de vals lento las extensiones del mar en verano arribaban a mis playas rodando juguetonas con las blancas y multicolores ostras que sonrientes las esperaban cual danzarinas sin alas a sus zapatillas mágicas, para jugar.  Sueños de amanecer que las auroras trajeron un  día y que aún son conservados por las gaviotas del norte en sus plumajes de sal… La brisa sopla mortecina apenas moviendo las nubes, y por las arenas de la isla una palmera se luce cual poema en nueva pluma….Hay silencio.  La vida la islita es solitaria; los peces recorren en bandadas los corales en busca de refugio y de alimento, y las aves que de arriba ven los peces bien los cazan.  Cristalina es el agua cercana y verde a la distancia, allá por donde  se alejan los veleros cuando van por las rutas del pirata y la comba azul de cielo toca el agua sin mojarse… El sol se acerca al medio día y calienta un tanto la arenas  de la isla, dándoles a las iguanas la idea de que se han mudado al Sahara.   Me despierto al oír unas tonadas, yo que dormía flotando en mi chalupa después que mi barco naufragara. Silencio había porque aquellas olas que así viajan en verano no hacen ruido, más de pronto mis oídos se alertaron a una voz que no sede quien, de donde y ni como, podía en este océano cantar. Naves no había….
Mi cerebro  enfebrecido por las horas, los días y las noches flotando en el mar sin esperanzas de vivir, me hacia ver grande….grande…grande mi vida.  Las realidades de mi vida se unían a galope en el potro del orate para hacerme creer que todo lo fui, tuve y amé  allí tenia,  y que el agua que no tenia era  el licor y las aves que volaban por arriba eran faisanes que cazaba en mis predios y comía… un poco de locura eran mis horas y alegre navegaba yo y mis  velas seguían impulsando mi velero…. ¡Cuan bella era mi vida es esas horas de locura!...Yo venia de conquistar los Siete Mares, los Polos con sus hielos y sus luces; los trópicos sonrientes y los humeantes montoncitos de piedras que hacen islas, todo era mio.  Mujeres licor y mis anclas, danzas de caderas sin dueños, guitarras dormilonas, y bandoneones que al moverse los tacones que rezóngan sin clemencia mientras que  algún saxofón desde la orilla trasera del camino le adulan a las olas de mis mares… es evidente que llevo el vino de la noche en mi cabeza…. Canta  una mujer…
Estoy enloqueciendo… almirante de mi flota y de mis naves  voy  gozoso por los mares, voy soñando…soy feliz en mis adentros y si el mundo penetrara en mis sentidos me vería el rey de los marinos…. Piratas pasan y sus sables destrozo con mis manos  limpias, puertos nuevos con mis blancas velas y anclas de amores que me conquistan por tantas noches, muelles de blancas frazadas que cubren cuerpos que amarme dicen; vayan las horas de besos grises, de besos verdes de amores muchos… vayan los puertos de mis conquistas  y las propinas que esconden almas porque las damos por más placer. Sueño.
Pero deliro; tal vez ya muerto mi cuerpo allí en el bote yace y es el espíritu mio que  al alejarse siente todavía sus carnes y cree que ama y es amado; cree que vive y ya es pasado…. Tal vez…. Tal vez el tiempo se ha detenido sobre una roca allá junto al faro y desde allí vigila mi alma que pasa.
Oigo una voz de mujer, una leve y distante melodía en la distancia… despierto al fin y me froto los ojos tratando de mirar a través del reflejo del sol sobre las olas y de mis sentidos que acelerados ven las cosas como ciertas, donde me veo como era y como sigo sabiendo que lo era, y vivo en el aplauso de los hombres y los brazos de las bellas mujeres por mi mundo de quijote y de aventuras.
Una cola de pez se ve saltando  a la distancia, después hay otra, y hay muchas otras  y todas mías si las quiero, al fin dueño del mar ya soy.  Pero las dudas me asaltan… sueño, estoy soñando; no, tengo fiebre, mi cerebro me engaña,  mi nave surca el cristal bajo un sol fuerte, la sed me está empujando, la mente anda en hamacas…
Se ve apenas con los ojos cerrados y las fibras del corazón vibrando un letrero que saliendo del fondo de los mares me reta: ¿Me cuentas  si existen las sirenas? 
El canto parece de mujer de voz sutil, y abro los ojos, leo, me burlo de mis propios pensamientos, Estoy loco ya, me digo; tengo mucha sed.  Me mojo las manos para que mi cuerpo reciba un poquito de humedad y no morir deshidratado.  Se acerca aún más la voz…
Aléjate, ¿no ves que estoy glorioso navegando por mis mares  a velas, a solas, a la voluntad gozosa de las olas que me acunan con su amor y sus sonrisas?   No te enamores de mi, le canto  ya que su voz música es, pero cual toro embravecido insiste en correr hacia el torero.
Me atrevo a cantar sobre la borda ya mi cerebro anda entre candelas, y acaso ¿qué más bello que una princesita de una reino que ama y por amar pierde al ser amado y al mar se lanza?
No, Señor; ella no ha muerto, una ballena que pasaba y la oyó llorar por amor se la cargó y allá en la isla secreta de sus mares la enseñó a nadar, la adoptó y le fabricó una cola con la tela que una estrella del mar hizo en el cielo y se la trajo envuelta en una perla.
No terminé la historia cantada cuando a mis espaldas sonaba una sonriente vocecita femenina:
¿Busca usted a alguien…?
Loco como estaba sin saber si era  mujer, estrella o diosa  un beso en mejilla le planté…
Mi sueño se hizo largo y luego despierto allá la playa.
Me cuentan las chicharas que fue mucho, que mi bote había llegado sin sus remos y mi cuerpo transportado por  una sirenita  había carenado a la playa en una tarde de verano, casi muerto.
Una ostra que se me hizo buena amiga me contó que muchos escualos en el camino me atacaron, que ballenas y marsopas me rodeaban y que aquella sirenita allí entre todos, luchando contra sus propios amores del pasado, sus perseguidores insensatos de la aguas, los erizos que le clavan sus espinas y los golpes que las olas me daban contra las rocas firmes del arrecife, cargada conmigo que es pesado y herida por mil dardos de las fieras de los mares y los aires, por la playa me cargó.
Nació el amor.  Creo que locura en mi beso descarado hubo;  y locura en sus labios que empezaron a penar porque allí fuera donde el próximo beso yo le diera.
Salvó mi vida, nació el amor; volaron las gaviotas mientras con el día claro en el cielo surgió un arcoíris cual collar de perlas de Mallorca y una vocecita con tono de ballena enamorada comenzó a tararear una tonada aquí a mi lado.
Tuvimos frio. Esa noche allí en la playa cambió el viento, ella no podía vivir  a mi lado fuera del agua ni yo al suyo bajo el mar, pero la distancia, tan cerca y a la vez tan difícil hizo de nuestro amor una sonrisa cruel para acercarnos… Las tormentas se multiplican, las arenas vuelan  a diario y las olas a veces hacen muy difícil oír su canto y a ella difícil leer mis cuentos de princesitas y luces, de
De carnavales en cielo  y de danzas gitanas sobre la nube que nació en la flor.
Y en medio de las espinas, los filos, las olas, las tormentas, las dentelladas y las envidias nuestras dos alma unidas se pasean nadando alrededor de la isla, medio mar y medio arena; algo mio y algo suyo, y los dos un solo mundo…. Dos no más somos ya uno.  Reyes del mar y de las penas, dueños de los reflejos de la luz sobre las olas, espíritus libres  que sabemos nadar, flotar, cantar, amar…  y de la princesita convertida en princesa y el marino aventurero nació en la isla de las blancas arenas y las caracolas que hablan, el amor más grande del reino de los mares….
Y un día sereno en que sobre el arena, mojados, nos amábamos  apareció en la playa un ser que era el Dios mismo.  Por un momento nos miró 
Se acercó sonriente, levantó la mano y nos indicó a las flores con su dedo al que vino a posarse una libélula azul….
Dios tomó mi mano y la unió a la de ella y sobre las dos manos nuestras unidas plantó aquella libélula azul.
Este es vuestro anillo azul
Juradme que os amareis hasta la muerte y más allá de la muerte cuando lleguéis a mi reino en el cielo.  Juramos.
Lo que Dios en cielo une ningún hombre podrá separar
Os declaro por mi fe, marido y mujer
Y os doy esta libélula como el signo de mi buena fe en vuestro amor.
¡AMEN!
No quiero despertar.







Las redondas olas sin crestas que recorren a ritmo de vals lento las extensiones del mar en verano arribaban a mis playas rodando juguetonas con las blancas y multicolores ostras que sonrientes las esperaban cual danzarinas sin alas a sus zapatillas mágicas, para jugar.  Sueños de amanecer que las auroras trajeron un  día y que aún son conservados por las gaviotas del norte en sus plumajes de sal… La brisa sopla mortecina apenas moviendo las nubes, y por las arenas de la isla una palmera se luce cual poema en nueva pluma….Hay silencio.  La vida la islita es solitaria; los peces recorren en bandadas los corales en busca de refugio y de alimento, y las aves que de arriba ven los peces bien los cazan.  Cristalina es el agua cercana y verde a la distancia, allá por donde  se alejan los veleros cuando van por las rutas del pirata y la comba azul de cielo toca el agua sin mojarse… El sol se acerca al medio día y calienta un tanto la arenas  de la isla, dándoles a las iguanas la idea de que se han mudado al Sahara.   Me despierto al oír unas tonadas, yo que dormía flotando en mi chalupa después que mi barco naufragara. Silencio había porque aquellas olas que así viajan en verano no hacen ruido, más de pronto mis oídos se alertaron a una voz que no sede quien, de donde y ni como, podía en este océano cantar. Naves no había….

Mi cerebro  enfebrecido por las horas, los días y las noches flotando en el mar sin esperanzas de vivir, me hacia ver grande….grande…grande mi vida.  Las realidades de mi vida se unían a galope en el potro del orate para hacerme creer que todo lo fui, tuve y amé  allí tenia,  y que el agua que no tenia era  el licor y las aves que volaban por arriba eran faisanes que cazaba en mis predios y comía… un poco de locura eran mis horas y alegre navegaba yo y mis  velas seguían impulsando mi velero…. ¡Cuan bella era mi vida es esas horas de locura!...Yo venia de conquistar los Siete Mares, los Polos con sus hielos y sus luces; los trópicos sonrientes y los humeantes montoncitos de piedras que hacen islas, todo era mio.  Mujeres licor y mis anclas, danzas de caderas sin dueños, guitarras dormilonas, y bandoneones que al moverse los tacones que rezóngan sin clemencia mientras que  algún saxofón desde la orilla trasera del camino le adulan a las olas de mis mares… es evidente que llevo el vino de la noche en mi cabeza…. Canta  una mujer…

Estoy enloqueciendo… almirante de mi flota y de mis naves  voy  gozoso por los mares, voy soñando…soy feliz en mis adentros y si el mundo penetrara en mis sentidos me vería el rey de los marinos…. Piratas pasan y sus sables destrozo con mis manos  limpias, puertos nuevos con mis blancas velas y anclas de amores que me conquistan por tantas noches, muelles de blancas frazadas que cubren cuerpos que amarme dicen; vayan las horas de besos grises, de besos verdes de amores muchos… vayan los puertos de mis conquistas  y las propinas que esconden almas porque las damos por más placer. Sueño.

Pero deliro; tal vez ya muerto mi cuerpo allí en el bote yace y es el espíritu mio que  al alejarse siente todavía sus carnes y cree que ama y es amado; cree que vive y ya es pasado…. Tal vez…. Tal vez el tiempo se ha detenido sobre una roca allá junto al faro y desde allí vigila mi alma que pasa.

Oigo una voz de mujer, una leve y distante melodía en la distancia… despierto al fin y me froto los ojos tratando de mirar a través del reflejo del sol sobre las olas y de mis sentidos que acelerados ven las cosas como ciertas, donde me veo como era y como sigo sabiendo que lo era, y vivo en el aplauso de los hombres y los brazos de las bellas mujeres por mi mundo de quijote y de aventuras.

Una cola de pez se ve saltando  a la distancia, después hay otra, y hay muchas otras  y todas mías si las quiero, al fin dueño del mar ya soy.  Pero las dudas me asaltan… sueño, estoy soñando; no, tengo fiebre, mi cerebro me engaña,  mi nave surca el cristal bajo un sol fuerte, la sed me está empujando, la mente anda en hamacas…

Se ve apenas con los ojos cerrados y las fibras del corazón vibrando un letrero que saliendo del fondo de los mares me reta: ¿Me cuentas  si existen las sirenas? 

El canto parece de mujer de voz sutil, y abro los ojos, leo, me burlo de mis propios pensamientos, Estoy loco ya, me digo; tengo mucha sed.  Me mojo las manos para que mi cuerpo reciba un poquito de humedad y no morir deshidratado.  Se acerca aún más la voz…

Aléjate, ¿no ves que estoy glorioso navegando por mis mares  a velas, a solas, a la voluntad gozosa de las olas que me acunan con su amor y sus sonrisas?   No te enamores de mi, le canto  ya que su voz música es, pero cual toro embravecido insiste en correr hacia el torero.

Me atrevo a cantar sobre la borda ya mi cerebro anda entre candelas, y acaso ¿qué más bello que una princesita de una reino que ama y por amar pierde al ser amado y al mar se lanza?

No, Señor; ella no ha muerto, una ballena que pasaba y la oyó llorar por amor se la cargó y allá en la isla secreta de sus mares la enseñó a nadar, la adoptó y le fabricó una cola con la tela que una estrella del mar hizo en el cielo y se la trajo envuelta en una perla.

No terminé la historia cantada cuando a mis espaldas sonaba una sonriente vocecita femenina:

¿Busca usted a alguien…?

Loco como estaba sin saber si era  mujer, estrella o diosa  un beso en mejilla le planté…

Mi sueño se hizo largo y luego despierto allá la playa.

Me cuentan las chicharas que fue mucho, que mi bote había llegado sin sus remos y mi cuerpo transportado por  una sirenita  había carenado a la playa en una tarde de verano, casi muerto.

Una ostra que se me hizo buena amiga me contó que muchos escualos en el camino me atacaron, que ballenas y marsopas me rodeaban y que aquella sirenita allí entre todos, luchando contra sus propios amores del pasado, sus perseguidores insensatos de la aguas, los erizos que le clavan sus espinas y los golpes que las olas me daban contra las rocas firmes del arrecife, cargada conmigo que es pesado y herida por mil dardos de las fieras de los mares y los aires, por la playa me cargó.

Nació el amor.  Creo que locura en mi beso descarado hubo;  y locura en sus labios que empezaron a penar porque allí fuera donde el próximo beso yo le diera.

Salvó mi vida, nació el amor; volaron las gaviotas mientras con el día claro en el cielo surgió un arcoíris cual collar de perlas de Mallorca y una vocecita con tono de ballena enamorada comenzó a tararear una tonada aquí a mi lado.

Tuvimos frio. Esa noche allí en la playa cambió el viento, ella no podía vivir  a mi lado fuera del agua ni yo al suyo bajo el mar, pero la distancia, tan cerca y a la vez tan difícil hizo de nuestro amor una sonrisa cruel para acercarnos… Las tormentas se multiplican, las arenas vuelan  a diario y las olas a veces hacen muy difícil oír su canto y a ella difícil leer mis cuentos de princesitas y luces, de

De carnavales en cielo  y de danzas gitanas sobre la nube que nació en la flor.

Y en medio de las espinas, los filos, las olas, las tormentas, las dentelladas y las envidias nuestras dos alma unidas se pasean nadando alrededor de la isla, medio mar y medio arena; algo mio y algo suyo, y los dos un solo mundo…. Dos no más somos ya uno.  Reyes del mar y de las penas, dueños de los reflejos de la luz sobre las olas, espíritus libres  que sabemos nadar, flotar, cantar, amar…  y de la princesita convertida en princesa y el marino aventurero nació en la isla de las blancas arenas y las caracolas que hablan, el amor más grande del reino de los mares….

Y un día sereno en que sobre el arena, mojados, nos amábamos  apareció en la playa un ser que era el Dios mismo.  Por un momento nos miró 

Se acercó sonriente, levantó la mano y nos indicó a las flores con su dedo al que vino a posarse una libélula azul….

Dios tomó mi mano y la unió a la de ella y sobre las dos manos nuestras unidas plantó aquella libélula azul.

Este es vuestro anillo azul

Juradme que os amareis hasta la muerte y más allá de la muerte cuando lleguéis a mi reino en el cielo.  Juramos.

Lo que Dios en cielo une ningún hombre podrá separar

Os declaro por mi fe, marido y mujer

Y os doy esta libélula como el signo de mi buena fe en vuestro amor.

¡AMEN!

No quiero despertar.




La Libélula azul






Las redondas olas sin crestas que recorren a ritmo de vals lento las extensiones del mar en verano arribaban a mis playas rodando juguetonas con las blancas y multicolores ostras que sonrientes las esperaban cual danzarinas sin alas a sus zapatillas mágicas, para jugar.  Sueños de amanecer que las auroras trajeron un  día y que aún son conservados por las gaviotas del norte en sus plumajes de sal… La brisa sopla mortecina apenas moviendo las nubes, y por las arenas de la isla una palmera se luce cual poema en nueva pluma….Hay silencio.  La vida la islita es solitaria; los peces recorren en bandadas los corales en busca de refugio y de alimento, y las aves que de arriba ven los peces bien los cazan.  Cristalina es el agua cercana y verde a la distancia, allá por donde  se alejan los veleros cuando van por las rutas del pirata y la comba azul de cielo toca el agua sin mojarse… El sol se acerca al medio día y calienta un tanto la arenas  de la isla, dándoles a las iguanas la idea de que se han mudado al Sahara.   Me despierto al oír unas tonadas, yo que dormía flotando en mi chalupa después que mi barco naufragara. Silencio había porque aquellas olas que así viajan en verano no hacen ruido, más de pronto mis oídos se alertaron a una voz que no sede quien, de donde y ni como, podía en este océano cantar. Naves no había….

Mi cerebro  enfebrecido por las horas, los días y las noches flotando en el mar sin esperanzas de vivir, me hacia ver grande….grande…grande mi vida.  Las realidades de mi vida se unían a galope en el potro del orate para hacerme creer que todo lo fui, tuve y amé  allí tenia,  y que el agua que no tenia era  el licor y las aves que volaban por arriba eran faisanes que cazaba en mis predios y comía… un poco de locura eran mis horas y alegre navegaba yo y mis  velas seguían impulsando mi velero…. ¡Cuan bella era mi vida es esas horas de locura!...Yo venia de conquistar los Siete Mares, los Polos con sus hielos y sus luces; los trópicos sonrientes y los humeantes montoncitos de piedras que hacen islas, todo era mio.  Mujeres licor y mis anclas, danzas de caderas sin dueños, guitarras dormilonas, y bandoneones que al moverse los tacones que rezóngan sin clemencia mientras que  algún saxofón desde la orilla trasera del camino le adulan a las olas de mis mares… es evidente que llevo el vino de la noche en mi cabeza…. Canta  una mujer…

Estoy enloqueciendo… almirante de mi flota y de mis naves  voy  gozoso por los mares, voy soñando…soy feliz en mis adentros y si el mundo penetrara en mis sentidos me vería el rey de los marinos…. Piratas pasan y sus sables destrozo con mis manos  limpias, puertos nuevos con mis blancas velas y anclas de amores que me conquistan por tantas noches, muelles de blancas frazadas que cubren cuerpos que amarme dicen; vayan las horas de besos grises, de besos verdes de amores muchos… vayan los puertos de mis conquistas  y las propinas que esconden almas porque las damos por más placer. Sueño.

Pero deliro; tal vez ya muerto mi cuerpo allí en el bote yace y es el espíritu mio que  al alejarse siente todavía sus carnes y cree que ama y es amado; cree que vive y ya es pasado…. Tal vez…. Tal vez el tiempo se ha detenido sobre una roca allá junto al faro y desde allí vigila mi alma que pasa.

Oigo una voz de mujer, una leve y distante melodía en la distancia… despierto al fin y me froto los ojos tratando de mirar a través del reflejo del sol sobre las olas y de mis sentidos que acelerados ven las cosas como ciertas, donde me veo como era y como sigo sabiendo que lo era, y vivo en el aplauso de los hombres y los brazos de las bellas mujeres por mi mundo de quijote y de aventuras.

Una cola de pez se ve saltando  a la distancia, después hay otra, y hay muchas otras  y todas mías si las quiero, al fin dueño del mar ya soy.  Pero las dudas me asaltan… sueño, estoy soñando; no, tengo fiebre, mi cerebro me engaña,  mi nave surca el cristal bajo un sol fuerte, la sed me está empujando, la mente anda en hamacas…

Se ve apenas con los ojos cerrados y las fibras del corazón vibrando un letrero que saliendo del fondo de los mares me reta: ¿Me cuentas  si existen las sirenas? 

El canto parece de mujer de voz sutil, y abro los ojos, leo, me burlo de mis propios pensamientos, Estoy loco ya, me digo; tengo mucha sed.  Me mojo las manos para que mi cuerpo reciba un poquito de humedad y no morir deshidratado.  Se acerca aún más la voz…

Aléjate, ¿no ves que estoy glorioso navegando por mis mares  a velas, a solas, a la voluntad gozosa de las olas que me acunan con su amor y sus sonrisas?   No te enamores de mi, le canto  ya que su voz música es, pero cual toro embravecido insiste en correr hacia el torero.

Me atrevo a cantar sobre la borda ya mi cerebro anda entre candelas, y acaso ¿qué más bello que una princesita de una reino que ama y por amar pierde al ser amado y al mar se lanza?

No, Señor; ella no ha muerto, una ballena que pasaba y la oyó llorar por amor se la cargó y allá en la isla secreta de sus mares la enseñó a nadar, la adoptó y le fabricó una cola con la tela que una estrella del mar hizo en el cielo y se la trajo envuelta en una perla.

No terminé la historia cantada cuando a mis espaldas sonaba una sonriente vocecita femenina:

¿Busca usted a alguien…?

Loco como estaba sin saber si era  mujer, estrella o diosa  un beso en mejilla le planté…

Mi sueño se hizo largo y luego despierto allá la playa.

Me cuentan las chicharas que fue mucho, que mi bote había llegado sin sus remos y mi cuerpo transportado por  una sirenita  había carenado a la playa en una tarde de verano, casi muerto.

Una ostra que se me hizo buena amiga me contó que muchos escualos en el camino me atacaron, que ballenas y marsopas me rodeaban y que aquella sirenita allí entre todos, luchando contra sus propios amores del pasado, sus perseguidores insensatos de la aguas, los erizos que le clavan sus espinas y los golpes que las olas me daban contra las rocas firmes del arrecife, cargada conmigo que es pesado y herida por mil dardos de las fieras de los mares y los aires, por la playa me cargó.

Nació el amor.  Creo que locura en mi beso descarado hubo;  y locura en sus labios que empezaron a penar porque allí fuera donde el próximo beso yo le diera.

Salvó mi vida, nació el amor; volaron las gaviotas mientras con el día claro en el cielo surgió un arcoíris cual collar de perlas de Mallorca y una vocecita con tono de ballena enamorada comenzó a tararear una tonada aquí a mi lado.

Tuvimos frio. Esa noche allí en la playa cambió el viento, ella no podía vivir  a mi lado fuera del agua ni yo al suyo bajo el mar, pero la distancia, tan cerca y a la vez tan difícil hizo de nuestro amor una sonrisa cruel para acercarnos… Las tormentas se multiplican, las arenas vuelan  a diario y las olas a veces hacen muy difícil oír su canto y a ella difícil leer mis cuentos de princesitas y luces, de

De carnavales en cielo  y de danzas gitanas sobre la nube que nació en la flor.

Y en medio de las espinas, los filos, las olas, las tormentas, las dentelladas y las envidias nuestras dos alma unidas se pasean nadando alrededor de la isla, medio mar y medio arena; algo mio y algo suyo, y los dos un solo mundo…. Dos no más somos ya uno.  Reyes del mar y de las penas, dueños de los reflejos de la luz sobre las olas, espíritus libres  que sabemos nadar, flotar, cantar, amar…  y de la princesita convertida en princesa y el marino aventurero nació en la isla de las blancas arenas y las caracolas que hablan, el amor más grande del reino de los mares….

Y un día sereno en que sobre el arena, mojados, nos amábamos  apareció en la playa un ser que era el Dios mismo.  Por un momento nos miró 

Se acercó sonriente, levantó la mano y nos indicó a las flores con su dedo al que vino a posarse una libélula azul….

Dios tomó mi mano y la unió a la de ella y sobre las dos manos nuestras unidas plantó aquella libélula azul.

Este es vuestro anillo azul

Juradme que os amareis hasta la muerte y más allá de la muerte cuando lleguéis a mi reino en el cielo.  Juramos.

Lo que Dios en cielo une ningún hombre podrá separar

Os declaro por mi fe, marido y mujer

Y os doy esta libélula como el signo de mi buena fe en vuestro amor.

¡AMEN!

No quiero despertar.




Solo Nunca Más

Mi Ultimo Puerto
Caminé sobre las huellas del fuego que ayer hubo, y senti en mis plantas las quemadas; viví en en extenso mar del sueño y aprendi que mi almohada es una roca, probé lo salado de una lágrima, más salada y más que el mar; arrastré las cadenas de mis anclas por el puerto donde se unen el sueño y la verdad, y clavé el puñal de las distancias en el fondo de mi propio corazón.... Fue la brisa de tus años hoy muy lejos, que impulsaron mis naves aún sin velas.... y las aguas que corrieron del desierto escapando a las arenas al cabo de los tiempos te trajeron a mi mundo de carenas y de naves, que sin remos y sin brazos casi pueden recalar aqui a mis besos..... Te he esperado no se cuanto, pués los siglos de creado el mundo es cuenta que se pierde tallada en una roca en honda cueva y de su historia solo queda en esta tierra una boca que te espera hace mil años y unos brazos prestos a acurrucarte aqui en mi pecho y cargada entre mis sueños lejos irme a soñar nunca más solo....Ver más

ILUMINACION NATURAL. MEMORIAS DE CHINA (I): “Todo empezó por casualidad”


Como ya sabéis Espacio Solar, especialista en Luz natural, hace un año empezó la aventura de entrar en el mercado Chino de la mano de un socio local. Todo empezó una tarde charlando con un amigo que tiene mucha experiencia en China y nos comentó que él podría tener los contactos necesarios para poder empezar con éxito esta aventura Asiática.
Y después de analizar las posibilidades y muchos mails entre Barcelona y Shanghai, decidimos que la oportunidad tenía sentido.


Todo esto pasaba en Marzo 2011 y después de casi un año de burocracia hemos conseguido completar la creación de una nueva empresa SHANGHAI DAYLIGHT SOLUTION  CO, Ltd;  una Joint venture entre Espacio Solar S.L. (57 %) y Metric Engineering Co, Ltd (43%), con sede en Shanghai.
Ya tenemos todas las licencias, que en caso de China son muchas: Licencia de actividad, Licencia para importar/exportar, Certificado de registro de impuestos, Permisos para abrir cuentas, etc…

Hay varios caminos para llevar este papeleo a cabo:
1.   Contratar a las muchas empresas extranjeras y en este caso Españolas que operan en China y que pueden darte este servicio. Suelen caras, pero realizas el espinoso camino acompañado de alguien que domina el idioma y la burocracia China.
2.   Ir por tu cuenta de la mano de tu socio Chino, estando expuesto a las traducciones que te hagan ellos de los múltiples documentos en Chino que hay que firmar. Finalmente este fue el camino escogido, puesto que no disponíamos inicialmente de mucho presupuesto y decidimos correr el riesgo, muy a pesar de las recomendaciones que nos hizo casi todo el mundo de no hacerlo. Para Escoger este camino es muy importante tener mucha confianza en tus socios, y nosotros la teníamos.

Durante estos meses se decidió, entre Chinos y Españoles, que teníamos que empezar la actividad comercial independientemente de no poder, todavía, operar legalmente, utilizando el nombre de Espacio Solar como proveedora de producto y la de Metric como empresa que legalmente podía operar en China.

La verdad es que ha sido muy provechoso dicho trabajo y después de viajar 5 veces a China en menos de 10 meses, hemos logrado entre otros proyectos montar uno de nuestros productos más innovadores, el DEPLOSUN HELIOSTATO en una promoción de lujo en Shanghai del promotor más grande de China a modo de test durante unos meses para que el cliente pudiese compararlo con un competidor Japonés. La luz natural empieza a tener interés entre los promotores.


Hoy estamos negociando con SIEMENS China para instalar nuestros DEPLOSUN Tubos de luz en una de sus nuevas fábricas en Chengdu, en este caso compitiendo con la empresa americana Solatube.

Por lo tanto recomiendo a todo aquél que quiera instalarse en China que se lance y pierda el miedo, pero sobretodo que busque un buen compañero de viaje, que debería de tener entre otras cualidades cierta mentalidad Occidental (o haber trabajado con empresas europeas).