viernes, 20 de junio de 2008

El fin del cine, el fin de la tele

La semana pasada tuvimos una trifulca en el cine. Un energúmeno quiso provocarnos y lo logró. Explotaba globos con su chicle y la cosa terminó mal, con hostias y con todo. Por eso decidimos dejar de ir al cine para siempre. Bah, esto es mentira, volveremos, pero no sé cuando. Yo necesito desconectar. Estoy dispuesta hasta de ver Screeners, que es lo que tendré que hacer para poder ver el final de El incidente, lo que sí pude ver en los escasos 15 minutos de película es que Zoey Deschanel estaba para matarla.

Con la tele pasa lo mismo, y no a mí, que ya lo superé hace muchos años y me bajo todo lo que quiero, incluso las series españolas en antena. No tengo la paciencia de verme el Internado en vivo y soportar 3 bloques de publicidad. Pero la tele va a morir incluso para los que no se bajan nada, porque la gente no tiene tanta paciencia. Y los anunciantes tienen que empezar a actuar.

Ayer El caso Wannichoff empezó a las 22,30 hs. Estaba anunciado a las 22:00 tanto en Vertele como en la web de TVE. Pero ¿qué pasó? Que estaba jugando Alemania en Cuatro. Entonces a TVE se le ocurrió poner anuncios durante todo ese tiempo ¿Quién estaba viendo la primera durante esa media hora? ¿Quién puede estar esperando sin hacer zapping a que empiece su programa? Si soy Coca cola pido que me devuelvan el dinero porque eso es un timo. Todo ese bloque publicitario no sirvió de nada. Estoy segura de que si la serie hubiera empezado a horario habría hecho más share. Además a eso de las 22,25 anunciaron que A continuación venía Balas de plata. Una locura.


De la serie qué decir que nadie sepa. Un desastre. Yo solo aguanté 15 minutos. Personajes inexistentes, dirección pésima, ningún guión. Actores para matarlos con la excepción de Luisa Martín.

Pero lo peor de esta propuesta, es que no funciona la típica "Whodidit" porque si estás mostrando la típica investigación no puedes sacarte de la manga en el último minuto a un personaje que no ha salido nunca como Tony King. Por eso estaba de más todo el proceso de interrogatorio de policía al novio de la chica... me parece perfecto que eso haya sido lo que pasó, pero están haciendo una miniserie, para los que sabemos lo que pasó y para los que no. Que el personaje principal fuera Dolores Vázquez (Y ese cambio de nombre a qué venía?) me parece bien, pero me parece que tenían que haber apostado por mantener su punto de vista.

Veo los resultados de la audiencia de ayer y me quedo sorprendida por esto:

- “Californication”: 8.5% y 730.000 / 9.1% y 544.000
- “Weeds”: 11.6% y 458.000 / 13.7% y 337.000 / 17.4% y 300.000

¿Anoche pusieron 2 capítulos de Californication y 3 capítulos de Weeds?

Observen las miles de personas que dejan de ver los capítulos. Esas 200.000 espectadores que no han visto el 5º de Californication ¿entenderán el 6º?

Aunque bien mirado, puede que no sea tan culebrón... pero y Weeds ¿Cómo puedes seguirla si no has visto el anterior? No se puede tener tan poco amor por la televisión. Lo de Cuatro es de locos.

Y a propósito, alucino con el poco share que hereda Cuestión de sexo del partido de la Eurocopa. Yo creo que el problema que tiene la serie es que, aunque es estupenda, porque los guiones son divertidos, los actores están muy bien y se nota que ahí hay un intento por hacer comedia de verdad, tiene el problema de la mayoría de series españolas, es repetitiva, va siempre de lo mismo y exprime a sus personajes. Diego Peretti como secundario era fantástico y las escenas en las que aparecía con Willy Toledo y su mujer eran realmente divertidas, pero no tenía que haber ganado tanto protagonismo. Como psicólogo del colegio era cojonudo, no entiendo eso de sacarlo del colegio para explotar todo su potencial. Lo mismo pasa con el alumno de la autoescuela. ¿Para qué darle un personaje de verdad, si la gracia era que saliera con cuentagotas? Esta temporada intenté engancharme pero estos dos detalles me hicieron recular.



A nivel argumental creo que han fallado con tantos cuernos. Si en la primera temporada la pareja principal se separó por los cuernos, que en la segunda pase lo mismo pero con otra pareja me parece muy mal.

Además no soporto ver un capítulo y que el otro sea una continuación, que no haya ninguna trama nueva, que herede las tramas del capítulo anterior. Esas cosas me sacan de quicio y no las concibo en una teleserie. Yo creo que hay que asumir que el público puede perderse uno, dos y tres capítulos de nuestras series. Y hay que escribir pensando en eso. Porque España tiene una paciencia finita. Y tiene todo el derecho a perderse lo que le de la gana. Está cansada de que la toreen.

Ayer después de esos insufribles 15 minutos de El caso Wanichoff decidimos ver Boston legal que no la habíamos visto nunca. ¡Es tan buena! ¡Tiene tantos personajes tan buenos! Además lo mejor que tiene es que sale todo el mundo, Juliet de Lost, Melora Hardin de The office, el malo de The Riches... es como si no fueras nadie si no has salido alguna vez en Boston legal.



La serie es divertida, tiene un ritmo trepidante, en 15 minutos pasa de todo. Las tramas legales son graciosas y no parece que vayan a ser muy profundas. La única similitud que encuentro con Lex es que el personaje de James Spader utiliza unos métodos poco éticos para solucionar sus casos. Pero ni es un mujeriego ni tiene pareja, ni nada parecido. Las diferencias entre ambos personajes son abismales. Y pensarán los de Globomedia "Eso es bueno! significa que somos originales". No, no es bueno para nada. Es terrible.

jueves, 19 de junio de 2008

Repaso general

De nuevo aquí.
Voy a hacer un repaso general de lo que tengo.

En primer lugar contaros que planté una patata. Brotó pero con las lluvias las hojas se fueron llenando de hongos y las fui quitando hasta que finalmente la planta murió. Metí la paleta y saqué esta "patatada". Son muy pequeñas, la mayor tendrá unos 6 cm, pero pensé que no le había dado tiempo a nada.
En próximas temporadas pondré de nuevo un tiesto.

De momento solo una de las 5 tomateras tiene tomates, aunque 4 tienen flores.


Los pimientos al fin despegan. Son los del extremo superior e inferior de la foto. El resto es albahaca que no sembré pero que ha aparecido y ahí la dejo de momento.


Los pepinos empiezan a crecer.

La menta que puse el año pasado, al final se ha adueñado de toda a jardinera. Huele que da gusto.



He puesto tres lechugas de semillero que parece que van bien. En unos pocos días parece que me las comeré.

Las fresas este año dan frutos por goteo pero espero que el año próximo me den más alegrías.


Lo que mejor va son los calabacines.

El primero que detecté.

Los semilleros de berenjena y escarola van para adelante.

Las hierbas aromáticas (orégano, romero y tomillo en ese orden en la foto) están desparramadas pero con buen aspecto.

La acelga parece que ha revivido después de una superpoda, para quitar las hojas machacadas por el pedrisco. Por cierto hace unos días volvió a caer un poco más.

Y por fin el compostador.

Lo tengo debajo de una mesa para que no le de el sol directamente.
Hasta la fecha no he encontrado ninguna lombriz que se escape. En el primero que hice no ganaba para safaris.

Cajón medio. De momento sin habitantes, pero con material en evolución. Ya he puesto café dos veces por la sensación de acidez al abrirlo.

Cajón superior con alguna lombriz. Espero poder reponer en poco tiempo las que se murieron.

Bueno, hasta otro día en que cuente más cosas.



miércoles, 18 de junio de 2008

Zapping

Por fin he vuelto al gimnasio después de un parón de muchos meses. La excusa era la operación pero la verdad es que detesto hacer deporte y no tener que ir al gimnasio durante todo este tiempo ha sido maravilloso. Recuerden que una vez les hablé de mi gimnasio, resulta que mientras haces bicicleta puedes ver lo que pasa en todas las cadenas porque hay una fila enorme de televisores de plasma. Solo puedes escuchar uno a la vez porque te tienes que poner los cascos, pero eso es lo de menos. Hoy vi los programas de por la mañana.

Cuatro: Las mañanas de Cuatro

Tele5: El programa de Ana Rosa

Antena3: Espejo público

TVE: Esta mañana

En la bicicleta estuve exactamente 30 minutos. En todo ese tiempo Ana Rosa entrevistó a un torero al que le iban a hacer un homenaje el sábado, empezó y acabó una sección de sucesos con la investigación del asesinato de un empresario sevillano y además comenzó una acalorada tertulia del corazón que tuve que dejar a medias muy a mi pesar.

Mientras, en Las mañanas de Cuatro, hablaban del partido de España de esta noche con un cadavezmásidiota Gonzalo Miró haciendo como que presentaba la sección. Allí todo el mundo llevaba bufandas de España y no sé a quién iba dirigido el programa porque a ver qué le interesa a la señora que está en casa el dichoso partido. Bastante tendrá con aguantarlo por la noche (que esto no es un mundial joder). Pero eso duró poco, porque durante unos larguísimos 25 minutos hablaron del nuevo caso de corrupción de Estepona. Insufrible. Y eso es tan típico de la cadena. Aprovechan cualquier trama sensacionalista para exprimirla. Son más rancios que Antena 3 y van de modernetes.

Y hablando de Antena3, es increíble que la estrella de la tertulia del programa de Susana Grisso sea Massiel. Creo que el centro del debate de hoy era Tita Cervera pero no le puse sonido. Tampoco hubo ningún cambio, media hora de tertulia.

En resumen, que Ana Rosa es líder por algo. Y si los encargados de hacer este tipo de programas fueran más al gimnasio a lo mejor se enterarían de cómo se tiene que hacer un magazine. Me pueden decir que les gusta más o menos Ana Rosa Quintana, no hablo de lo bueno o malo que es su programa, pero el trabajo del equipo de redacción entre uno y otro programa está a años luz. Por las mañanas, el resto de cadenas son un suplicio. Y no hay diferencia, todas van al mismo público objetivo aunque lo intenten disimular.

Como ya sabrán, esta semana termina Supermodelo y a mí eso me pone muy triste. Primero porque se veía venir y creo que ahí había un error de base. Si el programa ya era difícil de mantener una vez a la semana ¿cómo iba a ser posible a diario? No es lo mismo los contenidos de un Fama que de un Supermodelo. En Fama se pegan la mañana ensayando y con esto da para rellenar el programa de la tarde. Si la cosa sale mal meten ensayos y más ensayos con musiquita y con eso tienen. En Supermodelo generar contenidos es carísimo.

Hay que llevar a los chicos de excursión, tienen que interactuar con gente, necesitan como unos 15 profesores. Pero esa no es la cosa, lo más importante es que el baile llega a todo el mundo, la pasarela ni de coña. Yo espero que no piensen que el programa no funcionó por culpa de OT, espero que hagan un análisis objetivo de sus errores. Se han equivocado de público. No han sabido entender cuál es el público objetivo de su programa. Y pensar que los niños seguirían a los modelos antes que a los cantantes es de locos. De todos modos me parece que ha sido un error cancelarlo.

En este momento no existe peor cadena que Cuatro, y bastante difícil es hacerlo peor que Antena3. Ha comprado Californication, Dexter y Ugly Betty y es como si de pronto quisiera deshacerse de ellas. De la primera echó 3 capítulos seguidos el día de su estreno. Además usa esas campañas promocionales tan suyas en que casi nunca dicen la hora y el día. Dicen por ejemplo "los martes en Cuatro". Total, la hora a quién le importa.

La semana pasada Ugly Betty se emitió a las 21,40 horas. Después del piloto empezó un segundo capítulo. Ayer martes echaron la serie a las 22,30 horas. Y después otro capítulo más. ¿De qué van? ¿Con Dexter piensan hacer lo mismo? ¿Cómo puede engancharse una persona? Una cosa es ver dos capítulos seguidos de una serie bajada por voluntad propia y otra que te obliguen. Eso es faltar el respeto a tus espectadores.

¿Qué significa ese programa nuevo de Telecinco (Hombres y mujeres y viceversa)? ¿Y ese título terrible? ¿Por qué? ¿Qué es toda esa gente ridícula ligando unos con otros? ¿No les da vergüenza salir en televisión haciendo el gilipollas?

El método Gonzo es un poco coñazo, podrían limarle sus defectos pero va tan mal que Antena 3 no lo va a aguantar.

Y para terminar mi periplo de crítica televisiva de andar por casa, no puedo dejar de hablar del nuevo programa de TVE ¡Quiero bailar!. No vi el programa pero sé que uno de los alumnos de esa escuela de danza, escuela que prepara al mejor bailarín español para mandarlo a un concurso llamado Eurodance, es el ex profesor de baile de Supermodelo 2007, Rubén Nsue. Un tipo super profesional que encima estudió en Broadway. ¿Nos toman el pelo o qué?

Lo único que me alegra de nuestra televisión es El internado (prometo una super entrada analizando toda la temporada que está siendo apoteósica), OT (Risto e Iván son lo mejor que nos ha podido pasar este año) y por supuesto, El caso Wannikhoff que mañana no me pienso perder.

domingo, 15 de junio de 2008

Imitadores y ladrones

Entre imitar y plagiar hay un mundo. El proceso de imitación necesita esfuerzo, el plagio disimulo. Uno va hacia adelante y el otro recula. La mayoría de series españolas plagian y lo que tienen que hacer es imitar porque si lo hacen bien, si la propuesta es interesante y la historia es buena, la gente, incluidos los que se den cuenta, disfrutarán.

La semana pasada tras el estreno de Lex a todos se nos pasó por la cabeza Ally McBeal, y la verdad es que Lex no se parece en nada, pero en nada. Yo nombré la serie de David E. Kelly para hacer un chiste sobre la personalidad esquizoide tanto de Ally como de Eli Stone y la personalidad de un Javier Cámara al que solo le cambiaba el humor por culpa de un mal director.

Existe también una relación entre ambas series en el personaje de Richard Fish y Santi Millán. Es de cajón, porque Santi Millán está siempre en medio, no ejerce nunca de abogado y no para de hablar de dinero. Eso es un hecho. Pero no hay nada más que relacione Ally McBeal con Lex. Nada. Por desgracia. Porque si Lex dejara de coger detalles sueltos y se dedicara a imitar, a lo mejor sería buena. Si en vez de copiar descaradamente la sala de juntas de Ally McBeal, se tomaran todo ese tiempo en crear personajes con matices, a lo mejor la serie mejoraría.

Hay una clara coincidencia con Nip Tuck y es el triángulo entre Santi Millán, Natalie Poza y Javier Cámara, los 3 fueron juntos a la Universidad y por lo visto Millán siempre la ha querido. No, parece ser que ellos nunca se enrollaron, pero es que Millán no es el guaperas, el guaperas es el otro, el feo. Por eso tampoco se parece a Nip Tuck porque si se pareciera, Lex sería buena.

Acabo de ver el primer capítulo de la segunda temporada de Nip Tuck, es un capítulo fascinante que habla sobre el paso del tiempo. Nada más empezar el capítulo Sean Macnamara se sirve un café y al agacharse se encuentra con su propia imagen reflejada en la tostadora. Tiene papada, su piel se cae y eso pasa justo el día que cumple 40 años. Entonces entra Christian, su socio, con el regalo de cumpleaños, es una inyección de Botox. Sean rechaza el regalo, dice que la gente tiene que asumir su edad. Esa misma tarde Julia lo sorprende con una fiesta sorpresa de cumpleaños, aunque Sean ya lo sabía "Cuando llevas casado 20 años ya no hay sorpresas". Sean disfruta de su fiesta con su familia y sus amigos pero justo cuando va a soplar las velas, que son 40 y están distribuidas en una tarta interminable, se da cuenta de que no tiene fuerza para apagarlas todas.

En el capítulo hay dos tramas, la primera es la de la madre de Julia que quiere hacerse un lifting para que los hombres vuelvan a desearla y la segunda trama es la de Erica Naughton que da nombre al capítulo. Ella va a pedir una recontrucción total de su cara porque en una noche loca con su amigo gay, su arma se disparó. Ambos son como uña y carne, él la acompaña a la clínica y ella no puede vivir sin él. A lo largo del capítulo la trama da un giro, ellos no estaban en una noche loca, habían planeado suicidarse, estaban solos, habían llegado a una edad decisiva y a un punto de no retorno. Iban a dispararse el uno al otro, pero ella no disparó porque lo amaba. Él ahora quiere olvidar el pasado, parece ser que se ha enamorado de un chico y que por fin podrá tener la vida que siempre habían deseado. Pero ella no lo permitirá, porque no puede soportar que uno de los dos sea feliz, así que le dispara.

Las tramas van de lo mismo, solo que no se nota hasta el último momento. Las tramas cambian, giran y lo que parecía al principio se convierte en otra cosa. Eso es una serie de televisión.

En el segundo capítulo de Lex, hay una historia de una chica embarazada que perdió a su novio, tiene 15 años, sus padres quieren que aborte porque si no, puede morir. Esta trama ayuda al personaje de Natalie Poza a decidir tener un bebé porque también se ha quedado embarazada. Como trama, como historia no tiene ningún valor. No gira, no ayuda, y su sola existencia hace que sea super previsible la decisión de la protagonista.

La segunda trama va de infidelidad. Y aquí sí que podían jugar, ya que en el piloto se había hablado de la infidelidad nada menos que con los dos protagonistas. Sin embargo el tema se trata como siempre en la superficie. Lo convierten en una historia tonta con un personaje cómico (magnífica Marta Aledo) y un absurdo misterio con un mechero.

La cosa es que aunque las tramas son malas, son mucho más interesantes que lo que les pasa a sus protagonistas.

¿A qué quiero llegar con todo esto? A que los plagios son malos pero la imitación no. Olviden las tramas de Nip Tuck, copien la serie, copien la estructura, aprendan de los personajes, aprendan de lo mejor de Ally McBeal. Es más, cojan Ally McBeal y cojan después Eli Stone, y comprendan lo que puede pasar con dos series que en principio parecen iguales pero no lo son en absoluto. Eso se llama imitar, se llama aprender. Y no se llama robar. Y eso es hacer ficción.


Nueva cosecha

Esta mañana he recogido las dos lechugas que había y los ajos.


De las lechugas salen un par de platos de ensalada y los ajos tiernos para un mini revuelto, pero de mi huerta que esta mucho más rico, o al menos a mi me saben a gloría.

El año que viene pondré más ajos, para comer tiernos, que estos tienen una pinta y un olorcillo francamente agradable.

En los tiestos que han quedado libres pondré más lechugas de los semilleros y una escarola que también tengo en semillero.

También voy a repetir los semilleros de melón y sandía que se han echado a peder con el pedrisco.

Parece que las lombrices se han estabilizado con los cambios que hice, pero han quedado muy pocas, no más de 10. Intentaré traer de nuevo de Calahorra, ya que el otro día que pasé por allí no había por la huelga de trasportes.

Ha habidos 2 días de sol, hoy llueve de nuevo, y han aparecido muchas “moscas” blancas y pequeñas. Parece por lo que he leído que son normales e incluso beneficiosas para la evolución del compost.

Aclarar que tengo el compostador en el exterior, bajo una mesa que le protege un poco de las inclemencias directas del tiempo.

Lo que hago cuando salgo a la terraza donde tengo la huerta, es abrir directamente las cajas para que se aireen y cuando termino de enredar en las plantas ya prácticamente no hay mosquitas blancas.

Tras este problema con la acidificación, se parado por completo la producción de lixiviados (venía recogiendo 1/3 de litro por semana). Recordad que ha que diluirlo en agua para usarlo aproximadamente en relación 3:1 (3 de agua y 1 de lixiviado).

La materia verde que añadí se ha reducido a la octava parte más o menos por lo que he empezado de nuevo a añadir, siempre que es posible cortada en trozos pequeños. Ahora estoy poniendo sobretodo los desperdicios vegetales de la huerta.

Hasta el próximo día.

martes, 10 de junio de 2008

Castastrofe en el compostador

Esto empieza a pasar de castaño oscuro.
Sigue lloviendo.
Recogí los cogollos que con tanto agua se había subido y estaban bastante regulares de textura y sabor.


La acelga parece que sobrevive.


Las lechugas después de podarlas han mejorado mucho.


Los calabacines están en flor.


Vuelvo a tener una fresa.

Y ya tengo 2 tomates


En cuanto al compostador ha habido muchas y desagradables novedades.
Acumulé en la caja superior una abundante cantidad de materia verde e incluso ascendieron algunas lombrices. Parece ser que el proceso de descomposición acidifico el medio de manera intensa y como estaba arriba los lixiviados ácidos cayeron sobre el cajón que iba bien acidificándolo a su vez, lo que supuso un pequeña hecatombe. He cambiado el orden dejando el cajón inicial en la parte superior y con posos de café parece que he neutralizado la acidez.
Ya tengo claro que el material nuevo debe ir a la caja inferior y no a la superior como dicen, así la descomposición del material nuevo aunque se acidifique caerá al recolector de líquidos y no a la caja que funciona.
No creo que queden ni 15 lombrices adultas pero se ven bastantes pequeñas, así que traeré más y repoblare la caja superior.
También parece claro que la materia orgánica se debe añadir poco a poco para que la descomposición sea controlada.
Hasta otra si no nos hemos ahogado.





jueves, 5 de junio de 2008

Lex

El que quiera saber mi opinión sobre la season finale de House que se pase por aquí. Prácticamente opino lo mismo. "La cabeza de House" me parece bueno (a miles de kilómetros de otros finales de temporada) pero sin embargo "El corazón de Wilson" no me ha gustado nada.

Bueno, vamos con Lex.

Con Ally McBeal, David E. Kelly decidió unir comedia con drama a través de un personaje que en realidad no tenía un problema muy claro, más bien los tenía todos. Era una neurótica. En realidad era como cualquiera de nosotros, pero la cosa es que sus inquietudes, temores o deseos salían a la luz a través de flashes surrealistas. Si le gustaba un chico, su lengua le crecía y atravesaba todo el despacho para darle un buen lametón.

Eli Stone llegó una década después. En este caso se trataba de un abogado y claro, los hombres ni son tan neuróticos ni le dan tantas vueltas a las cosas. Si a Eli le gustara una chica le daría directamente el lametón, no necesitaría imaginárselo. A Eli lo que le pasa es que tiene esquizofrenia. O sea, es Ally McBeal solo que justificado.

En Lex, Javier Cámara ni se imagina cosas ni es esquizofrénico. Pero actúa como si lo fuera. Cambia de humor constantemente, no se sabe lo que quiere, a veces es un tío serio y a los 5 minutos está llorando. Y no, señores, no, eso no se llama matices, se llama CAOS.

Los casos ya no es que parezcan escritos por aprendices de guionistas, es que parecen escritos por niños de 10 años. Lo del pene intercambiable es propio de un capítulo de Nip Tuck, y esto válgame Dios ¡no lo veo mal! si no fuera porque no han sabido aprovecharlo. La cosa es que en Nip Tuck todas estas tramas extravagantes (en Ally Mcbeal también las había a montones) nunca se quedaban en la superficie, llevaban a conclusiones sólidas, reales e ingeniosas. Aquí se queda en lo anecdótico.
"No me importa que tengas un pene pequeño mientras estés en casa"
"¿Complejo de pene? mírame a mí que soy paralítica". Tremendo.



La trama principal... bueno, de escándalo. Y no hacía falta complicarlo tanto. Javier Cámara no necesita justificarse. No necesita explicar 10 veces que ha aceptado el caso para ser mejor persona. Que lo acepte y punto. ¿A qué viene tanta vuelta? Ni es creíble que lo haga para ganarse la confianza de su novia, ni es lógico que su novia lo tenga en mejor consideración por llevar ese caso después de pillarlo en la cama con otra. Y toda la trama pierde gracia por estar tan justificada, por ser tan antinatural, y es inevitable que el alegato final de risa.

Pero bueno, lo peor no es esto (que ya es malo que las 3 tramas sean flojísimas pero bueno)... hay mucho más:

- Javier Cámara está sobreactuado y no es su culpa para nada, porque todos sabemos de sobra que es un actor cojonudo así que la culpa la tiene que tener el que lo ha dirigido.

- ¿Qué hace allí Santi Millán? ¿Qué es ese personaje? Me recuerda mucho a Richard en Ally Mcbeal, sin embargo Richard era cojonudo porque salía poco. Éste está todo el tiempo, siempre en medio y no hace nada.

- Y Kira? El término mujer florero se hizo para ese personaje.

- ¿Tanta gente para qué? La peliroja esa que dicta sentencias cada dos por tres ¿qué significa?

-¿Una hermana? ¿Qué? ¿Por qué no una hija? Ah claro, porque ya estaba Shark e iba a cantar (me apuesto 50 euros).

Pero lo bueno viene ahora: la serie empieza con un chico, un abogado joven, que nos cuenta que Javier Cámara es el abogado más vil del planeta. Lo que no puedo llegar a entender es cómo es que al final el chico cambia de opinión. Principalmente porque todavía no entiendo qué es ese abogado. Me dicen que es bueno, pero yo no lo he visto. Su caso fue ridículo, y las artimañas para ganarlo sucias y nada inteligentes. No han sabido encontrar una motivación clara por la cual el tío aceptó el caso. Entonces ¿Qué me quieren contar? ¿De qué va esta serie? Esto es como tener Nip Tuck y hacer llorar a Christian Troy en el primer capítulo. ¡Para ver llorar a Christian Troy hubo que esperar una veintena!

Sin embargo nada de lo anterior tiene demasiada importancia porque la serie tiene el peor problema que pueda tener un producto de ficción: no encuentra el tono. Es drama pero quiere ser comedia. Y eso en España, en Hollywood, en la china y hasta en Globomedia, es un absoluto desastre.

viernes, 30 de mayo de 2008

The office: cuarta temporada

Cuando Joey salía con Dawson, queríamos que se liara con Pacey, pero en cuanto lo hacía enseguida queríamos que volviera con Dawson. Siempre es así. Por eso nos moríamos de miedo al imaginarnos que algún día la historia de amor entre Pam y Jim se haría realidad. Teníamos miedo de que se acabara la magia. La pregunta era ¿Queda algo después de la pasión? y gracias a Dios la respuesta fue sí.

Pam y Jim empezaron una historia de amor pero nosotros prácticamente no la veíamos. Solo podíamos hacerlo cuando la cámara estaba en el lugar preciso. Un gran acierto. Eran novios pero habían decidido disimular. Era una simulación también para nosotros, por si acaso. Era un amor desapercibido y secundario. Por mí perfecto.

A lo largo de la temporada la relación tuvo que dar un paso más y solo había un camino posible, la pedida de mano. En Cheers, después de cien mil capítulos de amor, rupturas, peleas y vueltas, un buen día Sam decidió pedirle a Diana que se casara con él, entonces ella dijo que no. Pero dijo que no porque Sam había elegido una situación horrorosa para declararse, ella quería un momento mágico. Así que Diana después del no, se lo explicó, claro. Pero Sam ya no podía más. Había vivido durante casi 8 años los altibajos de Diana y entonces le dijo "Que no quieres? Pues eso es lo que vas a tener". Y claro, otra ruptura. Pero estuvo bien, porque después de una boda ¿qué queda?.

Así que con Pam y Jim había que hacer algo parecido. Se sacaron de la manga una situación fantástica. Jim quiere declararse de la mejor manera posible, sin embargo todo le sale mal y nunca es el momento. Pam lo espera con ansias y cree que Jim no está por la labor. Eso solo puede llevar a la ruptura. Y será fantástico porque así desearemos que se líen de una vez, que es lo divertido. (¿Saben que los fans de Pam y Jim se llaman Jams?).



Ese es el cambio más claro de esta cuarta temporada. Pero hubo muchos más y fueron tantos que al principio nos sentimos decepcionados.

Primero, nos sorprendieron con 4 capítulos de 40 minutos que nos dejaron fríos porque los formatos están para respetarlos y una vez al año está bien, pero cuatro veces seguidas no. Segundo, todos los secundarios tenían sus entrevistas, hasta Stanley y Kevin hablaban a la cámara. Michael vivía feliz con Jan y Ryan se había convertido en una especie de yuppi chiflado.

The office es una serie limitada. Limitada por su escenario, por sus personajes... Todo se reduce, salvo excepciones, al horario de oficina y lo que suceda tiene que estar relacionado con el trabajo o en la mayoría de los casos con las consecuencias de no trabajar cuando hay que hacerlo. No es una sitcom normal. Y la cuarta temporada dio un paso más, de una manera nada sutil con el único fin de ampliar horizontes. Y vaya si los amplió. Por alguna razón lo mejor de la serie sucede fuera de la oficina. El viaje de Michael para declarar en el juicio por el despido de Jan, la discoteca en la que Ryan se pasa con la coca o el mejor capítulo de la temporada: la cena en casa de Jan y Michael.

Dos cosas me llaman la atención de esta temporada. Por un lado la decisión de no aprovechar el talento de un cómico como Ed Helms, cosa que no me molesta para nada, porque su personaje es demasiado histriónico. Pero es que había momentos en que Andy aparecía y yo pensaba "¿Pero no se había vuelto a Nueva York?".

Y por otro lado, el cambio -al menos a mí me lo parece- del personaje de Michael, que nunca había sido muy mujeriego (hubo un momento en la temporada dos que hasta pensamos que era gay por su capricho con Ryan) y ahora está despendolado. Que si pide citas a ciegas, que si la modelo de la revista, que si la nueva de recursos humanos... ¡Ay la nueva! Qué gran acierto. Cómo me gusta. Y ese juego que se trae con Kevin ¡qué genialidad!

A pesar de que mi capítulo favorito es el de la cena en casa de Michael, cuando pienso en esta temporada veo la escena de Stanley cantándole las cuarenta a Michael. Tardó cuatro años en hacerlo pero sus palabras, aunque ciertas, ya habían caducado. Michael ha madurado, Stanley no lo sabe porque no ve el documental pero nosotros sí. Vale, vale, se pasó con el regalito para Tobby pero por Dios ¿Quién puede querer a Tobby?

miércoles, 28 de mayo de 2008

¡Ya estamos todos! ¡Ahora pedrisco!

Lo dicho.
Si me echo a la cara al que se invento lo de la desertización le hago oír el chiqui-chiqui 1.500 veces seguidas.
Ahora además de llover cae pedrisco a degüello.
Nos ha caído la del pulpo en 10 minutos.
Pongo unas fotos para que os hagáis idea de la pedregada.
Solo falta una helada.

Semilleros y piedra




Lechugas







Albahaca, sandia y pimientos



Fresas



Calabacín


Acelga


Mañana cuando se derrita la piedra evaluaré los daños, pero la acelga tiene una pinta...

martes, 27 de mayo de 2008

Cositas sueltas

Llevo bastante tiempo, creo que desde la huelga de guionistas, sin dedicar un post en condiciones a una serie americana. Prácticamente solo he escrito sobre Lost y encima en otro blog, y aquí solo tocan fracasos españoles y realities que solo me gustan a mí. Pero lo voy a remendar. No hoy, pero pronto.

Sobre la muerte de Pollack qué decir... Puede que no haya sido un gran narrador, que no haya revolucionado el cine, pero es el director de una de las mejores comedias de la historia y por eso tiene que estar entre los grandes.




Tema Eurovisión


No me entra en la cabeza cómo puede ser que el público siga refiriéndose a Chikilicuatre como un friki después de ver a ese patinador enloquecido. ¿La gente está loca? Los del debate de La noria hicieron el ridículo más espantoso. Podría extenderme, pero mi novio ha escrito una entrada tan fabulosa que sería repetir.

Yo iba con Dinamarca. Inglaterra plagió Express Yourself de Madonna y las baladas eran vomitivas. La mejor frase la dijo ayer Calamaro en Buenafuente "A Chikilicuatre hay que aplaudirlo porque por primera vez fuimos a Eurovisión a perder dignamente".

Por cierto ¿No les parece que Calamaro cada día se parece más a Vincent Vega? (Mierda, después de poner esta frase me fui a buscar una foto y me encontré con esto!!!!)


Tema Indiana Jones.

Sí, esto no es televisivo, pero es el tema de la semana. Al que ose decir en los comentarios que esta entrega está a la altura de "La última cruzada" que se de por baneado (¿se puede banear en los blogs?). Ni siquiera voy a discutirlo, las diferencias son brutales. Indiana Jones, la saga, era divertida, los personajes carismáticos. Todos, buenos y malos, perseguían algo en concreto, había situaciones ingeniosas y lo más importante, la trama estaba llena de obstáculos. Obstáculos que hacían al personaje dar un giro para pasar al siguiente nivel. Todos esos puntos vuélvanlos del revés y tendrán "El reino de la calavera de cristal".



El personaje de Shia Lebouf ni existe ni evoluciona y miren que da para evolucionar. La química entre los dos protagonistas no es que no exista, es que no se aprovecha. No solo no hay diálogos divertidos, es que ni siquiera hablan entre ellos. La trama principal en cuanto la analizas friamente se vuelve ridícula. Nadie parece tener una motivación clara. Pero lo más grave es que Indiana Jones no está. No es ese hombre, es otro personaje. Y no hay ningún momento en la película en que temamos por su vida, ni por la suya ni por la de nadie y eso no puede pasar en una peli de aventuras por Dios.

Hay quien dice que una película así, de esta envergadura, está condenada al fracaso porque cualquier cambio, cualquier intento de meter baza de cualquiera es impensable y necesita de un montón de lío burocrático. No tengo ni idea de como es el mundo del cine por allí. Pero recuerdo por ejemplo La guerra de los mundos, que también habrá tenido su parafernalia pero salió bien y no me queda más remedio que pensar que Lucas es idiota, que Koepp estaba borracho y que Spielberg no supo como decir basta.


Tema cómicos

¿Cómo han podido desaprovechar una campaña gráfica tan mona como la de La tira haciendo esa serie tan mediocre? Me gusta mucho el rollo sketch cutre de Saturday nigh live pero no puedo soportar a Eva González. ¿Quién ha decidido que esa mujer podía hacer humor? ¿Qué le vieron en el Club de Flo? Pero lo peor no es eso ¿Quién ha decidido que un "humorista" puede ser actor? ¿Nadie se da cuenta de que NO ES LO MISMO?



Además de todo esto, los guiones son bastante flojos y los remates brillan por su ausencia. ¿por qué? ¿Hay un productor chiflado que borra los chistes buenos? ¿Qué pasa?

Lo mejor son las chicas del supermercado, que por cierto salen de un corto de Notodo.

Pero no podemos perder la esperanza. Hay gente que hace ficción televisiva sin salir en la tele. Aquí hay un ejemplo de que se puede ser actor siendo humorista y hacer ficción sin dinero. Lo único que hay que tener es talento. No pueden dejar de ver Tú antes molabas.

lunes, 26 de mayo de 2008

¡Llego la cosecha!

¡Como vuelva a oír a alguien quejarse de la sequía o el cambio climático le ahogo!
No para de llover día y noche.
Mi hermosa lechuga la he tenido que cosechar y esta noche me cenaré el cogollo que os presento.


También he recogido la cosecha de fresas (las de la foto no son la muestra, son todas las que había para cosechar) y la verdad es que la pequeña estaba mala, pero las otras 2 estaban estupendas.


He metido los cogollos a resguardo de la lluvia para que no se pudran como la lechuga.


He cogido otros 3 tiestos de 35 cm de diámetro y los pondré cualquier día de estos.
En el tiesto de la lechuga he trasplantado berenjenas y tengo el semillero de lechugas a tope.
Ha aparecido el primer tomate de la temporada.


Os pongo una fotos para que os hagáis una idea.


En cuanto al compostador va de cine. Las lombrices (más parecen anacondas) se reproducen y no se escapan ni un poco.

Nos regalaron unos guisantes y con las peladuras y los restos de mi casa he puesto el segundo piso hoy. Ya os contaré lo que pasa, si es que pasa algo.
Los lixiviados se siguen produciendo a buen ritmo.

Han entrado a esta página desde Noruega y desde Francia. Serán los comisarios de la Comunidad Económica Europea para lo de las subvenciones, las ayudas y esas cosillas.

Un saludo y hasta otra